Problemas, problemas, problemas.
Pocas cosas unen más a la gente que hablar de los problemas.
Creo que a veces se vuelve un tanto enfermizo. Hace años, cuando vivía en Sevilla, tenía una amiga que vivía constantemente quejándose. Daba exactamente igual lo que le pasara.
Si las cosas no le salían como quería… Se quejaba.
Si conseguía algo que quería… Se quejaba porque no creía que le fuese a durar.
Siempre vivía amargada y no disfrutaba de la vida.
Entonces yo pienso:
¿Realmente tenemos tantos problemas o es que simplemente nos encanta regodearnos en ellos para sentirnos comprendidos y escuchados?
Te diré algo, yo tengo que vigilarme de cerca (mentalmente hablando).
Si no lo hago corro el riesgo de caer también en la trampa de buscar problemas donde no los hay, y eso me quita la concentración, la motivación, las ganas de hacer cosas, la energía, la líbido.
Todo. Es jodido.
Pero cuando lo piensas y lo ves desde fuera, todo es mucho más sencillo.
Verás.
La cosa es tan simple como saber que el 99% de las cosas que te preocupan se pueden resolver:
1) Fortaleciéndote físicamente
2) Ganando más dinero
3) Haciendo un poco de meditación
No es más complicado, así que no deberías alejarte tampoco de eso.
Y adivina lo mejor de todo:
Las tres cosas están totalmente en tu mano. Solo dependen de TI.
Y especialmente si centras tus esfuerzos y tus ideas en ganar más dinero, en generar más, eso te permite mejorar el resto de puntos aún más rápido.
¿Quieres hacer más ejercicio?
Gana más dinero, compra tiempo y paga un gimnasio o un entrenador personal.
Tener más dinero también te permite ganar más dinero.
¿Quieres tener paz interior? La meditación te ayudará, pero el dinero también compra mucha tranquilidad, aunque los místicos digan que no.
En fin, de esas tres cosas yo solo puedo ayudarte con lo del dinero.
Y ni siquiera a ganarlo directamente.
Te puedo ayudar con el cómo ganarlo.
Por eso una consultoría puede resultar tremendamente útil. Porque te ayuda a tener más foco, a saber dónde no tienes que poner tu tiempo y dónde sí.
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Keep moving.
Iván Orange.
